Mientras el argentino Ángel Di María brilla en su paso por el Manchester United, al ex River, Radamel Falcao, la cosas no le van tan bien.

En sus 19 partidos disputados, tan sólo convirtió cuatro goles. Para colmo de males, su producción goleadora es más baja de lo esperado: cuatro goles.

Claro, la suma no suela mal si se trata de un delantero del fútbol argentino. Pero estamos hablando de un jugador por el que se pagó 9 millones de dólares por un año de préstamo.

El "tigre" colombiano tuvo otra opaca actuación en el duelo de los octavos de final de la Copa de la Asociación inglesa de fútbol (FA, por sus siglas en inglés) contra el modesto Preston North End.

Su inoperancia en la delantera de Manchester United fue tal que los aficionados locales le dedicaron el cántico "qué desperdicio de dinero", en referencia al alto costo de su salario y su poca productividad.

"Simplemente no tuvo la velocidad para escaparse de la defensa del Preston", dijeron en medios ingleses, en referencia a uno de los últmos partidos.

"¿Está bien físicamente? Está tratando de probar que es un jugador que debe estar aquí en el largo plazo pero no le está saliendo nada", señaló otro periodista europeo.

A esto hay que sumarlo los problemas con el entrenador holandés, Van Gaal, con quien no mantiene una buena relación por sus actuaciones.

Es que, al parecer, desde la rotura de ligamentos que sufrió el deportista, no ha recuperado el asombroso nivel que supo mostrar en el Atlético Madrid. De hecho, esa lesión lo dejó afuera del Mundial Brasil 2014, una baja que el seleccionado colombiano no pareció haber sufrido tanto.

El representante del colombiano, Jorge Mendes, ya insinuó que el delantero "jugará en uno de los mejores clubs del mundo el próximo año, sea el United o no". Para quedarse, el conjunto inglés debería desembolsar 66 millones de dólares, una cifra que con el desempeño actual parece elevada.