El original de este retrato fue conocido con el título “Guerrillero heroico” y fue tomado en 1960 durante el entierro de casi 100 víctimas de La Coubre, un barco francés que sufrió un atentado en La Habana.


Esta foto de Alberto Díaz (Korda) se hizo mundialmente famosa luego de la muerte del revolucionario argentino.  Fidel Castro eligió esta foto y mandó hacer un póster de un metro por setenta centímetros para una presentación en Italia.

A partir de ahí la imagen comenzó a reproducirse de manera incontable. Uno de los escasos originales de la fotografía fue subastado en Viena por aproximadamente 9600 dólares, en el año 2013.

Si bien el Che es utilizado como símbolo de la lucha antiimperialista y/o anticapitalista, muchas veces el uso su imagen en merchandising terminó siendo contradictoria.

El día que tomó la foto, Korda buscaba capturar retratos de los intelectuales franceses Jean Paul Sartre y Simone de Beauboir, quienes estaban cerca del Che sin saber que ese instante fotográfico terminaría por dar la vuelta al mundo.