¿Qué es cultura y qué es la anticultura? Se ve con las diferencias no están bien claras. Como bien definió José Pablo Feinmann hace unos días, la Legislatura porteña se equivocó feo con la distinción a Tinelli, porque en realidad, significó un premio al "antipensamiento".

El parlamento porteño le dará el próximo miércoles 12 la distinción a Cristian Dzwonik (tal su nombre real) tras la presentación de la diputada del PRO Karina Spalla: "Destacamos de Nik su mirada crítica e irreverente de la actualidad, su aporte humorístico a la cultura política desde el diario La Nación", afirmó.

Si bien, se trata de unos de los dibujantes más famosos del país, sobre todo por la mediatización de su producto/personaje "Gaturro", este humorista fue acusado de plagio en distintas oportunidades, y con pruebas muy fáciles de reconocer.

Si los propios colegas se enfrentan y cuidan su reputación por sobre la que Nik ha ganado, la señal es bien clara. En el año 2002, tras las nominaciones al premio Konex a lo mejor del humor gráfico, otro de los candidatos, Miguel Rep, se bajó de la postulación al no querer compartir la terna con el discutido dibujante.

Si asociamos de manera clara a Feinmann o a Rep como verdaderos referentes de la cultura argentina, es claro que la visión -macrista- de la Legislatura porteña sigue sin entender la diferencia entre la defensa de los hechos culturales en beneficio del desarrollo del pensamiento de una nación, y la televización de "TVculos", contenidos basura o la búsqueda férrea de la colonización de sujetos.