Un estudiante mexicano de 17 años diseñó un sostén para detectar el cáncer de mama
Julián Ríos Cantú recibió el premio de Global Student Entrepreneur Awards (GSEA), en Alemania, por su diseño de un corpiño que permite de forma indolora y prematura detectar el cáncer de mama.
A partir de la dramática experiencia de su madre que tuvo una doble mastectomía y casi pierde la vida, un joven mexicano de 17 años llamado Julián Ríos Cantú diseñó un sosten que a partir de sensores permite realizar chequeos y detectar, de forma prematura, el cáncer de mama.
Se trata de EVA, un sostén de biosensores, que le valió el premio del jurado del Global Student Entrepreneur Awards (GSEA), en Alemania.
De acuerdo con la National Breast Cancer Foundation y un estudio publicado en el British Medical Journal, por su radiación y la compresión de los senos- en los habituales estudios de mamas- se puede provocar la propagación de células cancerígenas a otras partes del cuerpo; por ello EVA se presenta como un método menos invasivo y doloroso.
"EVA es una red de biosensores [al menos unos 200] que va sobre el seno de la mujer, toma los datos de temperatura los analiza y a partir de ahí envía información a una aplicación o a cualquier computadora. En cuanto hay una malformación del seno o un tumor, hay un exceso de vascularización, entonces a mayor sangre, mayor flujo de temperatura", explicó Ríos Cantú, estudiante de Ingeniería.
Ríos Cantú ya había ganado anteriormente la primera edición del premio Everis México para emprendedores, gracias al cual tendrá un millón de pesos (USD 52.631) para terminar de desarrollar su proyecto. Con el premio ganado en Alemania tendrá otros USD 20.000 adicionales.
Cáncer de mama
El cáncer [el proceso de crecimiento y diseminación incontrolado de las células] de mama es el cáncer que se desarrolla en el tejido mamario. En el interior de las mamas de una mujer hay 15 ó 20 secciones llamadas lóbulos. A su vez, cada lóbulo está formado por pequeñas partes llamadas lobulillos. Los lobulillos contienen grupos de glándulas diminutas que pueden producir leche. Después del nacimiento del bebé, la leche fluye desde los lobulillos al pezón por unos tubos delgados llamados conductos. El espacio entre los lobulillos y los conductos está lleno de grasa y de tejido fibroso.
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