Los daños de los rayos solares en la piel de las personas no son ninguna novedad. Pero algunos casos extremos, representan ejemplos que sirven para alertar al resto sobre las dificultades de la dermis expuesta a los rayos UV.

El caso que se presenta es el del canadiense Bill McElligott, de 69 años, y una carrera de 28 años como conductor, suyo lado izquierdo de la cara tiene 20 años más de deterioro a raíz de los rayos solares a través del cristal, según indica el Huffington Post local.

Los choferes de larga distancia, y sobre todo aquellos que conducen camiones con más de 15 años de antigüedad -utilizados en transporte de animales o cereales con más frecuencia en nuestro país- sufren los efectos del sol en el lado izquierdo de sus rostros.

Un estudio publicado en la revista The New England Journal of Medicine hizo evidente las consecuencias del sol en la piel facial de los transportistas.

"Las personas que deban usar el coche habitualmente deben saber que a través de sus cristales reciben sol, que suele hacer estragos en cara, cuello, escote y manos; por lo que protegieron como si estuviesen al aire libre", afirmó Cristina Corredera, dermatóloga del Hospital Nisa Aguas Vivas, según la cadena de noticias ABC.