La NASA despejó una duda de años: ¿Nos podremos mudar a Marte?
Todos recordarán la película 'El vengador del futuro', quizá la más conocida sobre la posible futura vida en Marte donde la gente se movía en domos cerrados con oxígeno. Incluso, varios proyectos espaciales proyectaban ciudades en el Planeta Rojo. Pero, ¿es esto realmente posible? La NASA habló por primera vez al respecto.
Que este Planeta no da para más lo sabemos todos. Por eso, desde hace muchos años los expertos de la NASA entre otras agencias espaciales buscan la manera de poder 'mudarnos' algún día, cuando esto explote definitivamente.
Un reciente estudio realizado por universidades estadounidenses y patrocinado por la NASA echó un poco de luz sobre este tema y sobre el posible hábitat marciano de las futuras generaciones.
La terraformación es un hipotético proceso que permitiría cambiar las condiciones de un planeta para hacerlo habitable para las especies terrestres. Por una cuestión de proximidad, tanto de la Tierra como del Sol, Marte es el candidato número uno para este proceso. Pero, ¿realmente se puede hacer esto?
Parece que no tanto. La conclusión de este nuevo estudio describe que la actual atmósfera, que contiene CO2 en amplias proporciones, es demasiado delgada y fría para soportar el agua líquida, un ingrediente esencial para la vida.
Sus conclusiones -publicadas el lunes en Nature Astronomy- llegan justo después de que la semana pasada se anunciara la existencia en Marte de un lago de agua líquida y salada bajo el hielo.
Pero, en el artículo -publicado en Nature Astronomy- los expertos indicaron que ese proceso de terraformación no es "una posibilidad viable para Marte con la tecnología actual".
En el mejor de los escenarios, según los autores, el CO2 fácilmente accesible "solo podría triplicar la presión atmosférica de Marte", un quinto del cambio necesario para hacer que fuera habitable, y aumentaría la temperatura en menos de diez grados.
Además, la mayor parte de CO2 presente en los reservorios no está disponible y por lo tanto no puede ser fácilmente movilizado hacia la atmósfera. Así, los autores concluyen que "terraformar Marte usando el CO2 conocido en el planeta necesitaría de tecnologías que están muy por delante de las actualmente disponibles".