Juan Ignacio Maggi tiene 51 años, es cordobés, está casado y tiene cinco hijos: Juan Ignacio, Camila, Amparo, Catalina, y Sara. Antes de cumplir 40 sufrió un infarto y, sin embargo, se acercó a varios deportes: maratones, tenis, golf y esquí.

De hecho, fue uno de los dos deportistas argentinos que estuvieron en categoría esquí en los Juegos de Vancouver 2010 y en 2003 participó en el maratón de Nueva York, en la categoría handcycle (bicicleta de manos).

¿Por qué? Porque cuando tenía apenas tres meses de edad, Juan Ignacio sufrió una poliomielitis temprana que lo convirtió en discapacitado motriz.

Juan pasó medio siglo sentado: como se dijo, la poliomielitis lo había condenado a bastones y a una silla de ruedas.

Pero su vida cambió al convertirse en el primer paciente argentino en colocarse un C-brace, un sistema biónico que le permite volver a caminar y realizar las actividades que para la mayoría de las personas son cotidianas y 'normales', pero que él no pudo realizar durante cincuenta años.