De qué se trata el dispositivo para eliminar el COVID-19 del ambiente que desarrollan científicos platenses
Otro importante avance en la lucha contra el coronavirus se está llevando a cabo en el Instituto Argentino de Radioastronomía. Se trata de un sistema innovador que genera ozono en grandes cantidades.
Los científicos argentinos vienen teniendo un rol clave en la lucha contra la pandemia del coronavirus, y en La Plata se está desarrollando un dispositivo que permite eliminar hasta el 99,9 por ciento de los virus, incluido el coronavirus, de un ambiente cerrado.
El dispositivo funciona a través de la utilización de ozono generado en grandes cantidades por un sistema innovador que tiene la capacidad de controlar las concentraciones y condiciones del ambiente para garantizar su efectividad, según informa la agencia Télam.
El diseño es del Instituto Argentino de Radioastronomía (IAR) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) en conjunto con Conicet y la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires.
"El ozono es gas formado por moléculas constituidas por tres átomos de oxígeno. Es un desinfectante natural porque oxida la membrana lípida que recubre a los virus y destruye su estructura molecular evitando que el virus pueda reproducirse", explicó a Télam Gustavo Esteban Romero, Investigador Superior del Conicet y director del IAR.
Romero detalló que el dispositivo que diseñaron genera este gas "a través de una cámara de plasma en frío que produce una enorme cantidad de ozono que luego es inyectada por medio de una bomba en el ambiente", y añadió: “Tiene, además, sensores que le permiten establecer cuál es la concentración que se logra de ozono en el ambiente y ajusta su producción en forma inteligente para destruir el 99,9% de la carga viral que pueda haber en el recinto".
El equipo debe utilizarse en recintos cerrados y en ausencia de personas ya que "las concentraciones que se logran sobre lapsos de tiempos cortos, del orden de los 10 minutos, son extremadamente altas y la OMS no recomienda la exposición de las personas en lugares donde haya más de 0,1 partes por millón" y para "poder lograr el efecto de esterilización se necesitan más de mil veces de esa concentración".
"Se trata de un instrumento pensado para la etapa de 'vuelta a la normalidad' y está diseñado como una herramienta de desinfección efectiva, barata y rápida para minimizar posibles rebrotes de la enfermedad, y asegurar la higiene y la seguridad de la población", detalló Romero.