El provocador comentario de Macri cuando los manifestantes repudiaban su presencia
Es fácil culpar a quienes, hartos de sufrir los embates de este Gobierno mezquino, reaccionan con violencia. Pero la validez del discurso caduca con la violenta respuesta que ejercieron desde el Estado, ordenando una brutal represión policial y respondiendo violencia con más violencia verbal. Además, la Policía lo desmintió.
En Belisario Roldán se concentraron los vecinos para protestar ante la llegada de Macri y rechazar las políticas del Gobierno: para tapar lo insultos de la gente, el Presidente habló de corrido para las cámaras casi gritando y por si fuera poco, mintió asegurando que los habían atacado a piedrazos, según confirmó la policía que actuó en el lugar.
Entre palabras y promesas vacías -como siempre- con la compañía de la gobernadora María Eugenia Vidal y el intendente Carlos Arroyo, Macri se dio el lujo de mostrarse como víctima, cuando todos tenemos bien claro que es un representante del poder económico, y por consiguiente, sólo comparable con los victimarios.
En declaraciones radiales, el jefe de la Policía Bonaerense, Pablo Bressi, se describió los incidentes y dijo que "no hubo piedrazos contra Macri y Vidal", al tiempo que cambió el sentido de las propias palabras del presidente: "El presidente fue agredido verbalmente por unas personas que querían manifestar su descontento", aseguró el jefe de las fuerzas que actuaron.