El papa Francisco saludó a Donald Trump, quien juró como cuadragésimo quinto presidente de Estados Unidos, y le pidió que durante su mandato no se olvide de pobres, marginados y necesitados, y defienda la dignidad humana y la libertad "en todo el mundo".

El pontífice argentino felicitó al mandatario estadounidense a través de un mensaje en inglés, en el que le garantizó a Trump sus oraciones para que "Dios Todopoderoso le conceda sabiduría y fortaleza en el ejercicio de su alto cargo".

"Rezo para que sus decisiones sean guiadas por los ricos valores espirituales y éticos que han forjado la historia del pueblo estadounidense", sostuvo, y agregó: "El tamaño de Estados Unidos siga siendo medido sobre todo por sus preocupaciones por los pobres, los marginados y los necesitados quienes, como Lázaro, se paran ante nuestra puerta".

"En una época en la que nuestra familia humana es acosada por graves crisis humanitarias que demandan respuestas previsoras y políticamente unidas, rezo para que sus decisiones sean guiadas por la espiritualidad rica y los valores éticos que han dado forma a la historia del pueblo estadounidense y el compromiso de su nación por el avance de la dignidad humana y la libertad en todo el mundo", subrayó.

En febrero de 2016, cuando regresaba de una visita pastoral a México, el Papa dijo que quien favorece construir muros entre pueblos, en vez de puentes "no es cristiano".

Trump, que prometía que de ser elegido presidente construirá un muro en la frontera con México y que el país azteca pagaría la obra, replicó al pontífice diciendo que era "vergonzoso" que alguien le cuestione a la fe a otro.

El episodio obligó al entonces vocero papal, sacerdote Federico Lombardi, salir a aclarar que el Papa "de ninguna manera" atacó a Trump ni trató de influenciar a los votantes estadounidenses.

"De ninguna manera fueron un ataque personal ni una sugerencia de cómo votar", aseveró.