El enorme campo de pruebas donde la Unión Soviética detonó casi 500 bombas atómicas
Como en Nevada, Estados Unidos, la Unión Soviética tenía un espacio de testeo nuclear que afectó a los habitantes de Kazajistán para siempre.
Hace poco los científicos afirmaban que ya estábamos viviendo una nueva era geológica, "el Antropoceno", producto de los los primeros ensayos nucleares que tuvieron lugar a fines de la década del 40.
El lugar, conocido como "El Polígono"- cuyo nombre oficial era Sitio de Pruebas de Semipalátinsk- se halla en Kazajistán y fue el lugar donde la Unión Soviética (URSS) realizó pruebas atómicas con un promedio aterrador: llegó a detonar un promedio de 10 bombas atómicas por año entre 1949 y 1989.
En total el gobierno de la desaparecida URSS detonó allí 456 artefactos nucleares provocando un impacto medioambiental y social en la estepa ubicada en Asia Central,
La zona fue elegida en su momento por su geografía amplia sin perturbaciones naturales, su relativa cercanía con Moscú y porque según el temido director de la policía secreta- y más tarde jefe del proyecto soviético para la bomba atómica- Lavrenti Beria, era un lugar prácticamente deshabitado. Incluso fue allí donde el zar Nicolás I desterró al escritor disidente ruso Fiódor Dostoyevski en 1854.
Sin embargo, el lugar no estaba deshabitado sino que cuando se iniciaron las pruebas vivían en la zona al menos unas 700 mil personas que todavía hoy sufren los impactos de la experimentación nuclear.
Con las pruebas, comenzaron a surgir nuevas enfermedades, hubo una epidemia de cáncer y algunas personas, e incluso familias enteras con niños, se suicidaron, según narraron testigos a la BBC.
A fines de la década de 1980 surgió el conocido como Movimiento Antinuclear Nevada-Semipalátinsk que al adquirir relevancia internacional logró que la URSS cancelara 11 de las 18 pruebas nucleares programadas para 1990 en ese territorio.
Finalmente, el 29 de agosto de 1991, el presidente kazajo Nursultan Nazarbayev cerró de forma oficial Semipalátinsk aunque quedó material olvidado que fue desmantelado por la población, exponiéndose nuevamente a la radiación.
El Instituto de Medicina Radioactiva y Ecología de Kazajistán estima que entre 1949-1962 que más de un millón de habitantes quedaron expuestos a la radiación en diversos niveles.
"Lo que pasó en 'El Polígono' es diferente a otras catástrofes radiactivas como Chernóbil o Hiroshima", le explica a BBC Mundo el doctor Talgat Muldagaliev ya que no fue solo una explosión sino una experimentación continua.
Fuente: BBC